Turismo Sustentable en la Riviera Maya, ¿Mito o realidad?

Turismo Sustentable en la Riviera Maya, ¿Mito o realidad?

Durante las últimas décadas hemos oído hablar mucho de él como una forma de hacer turismo en el futuro, pero hoy en día es una realidad que los turistas que queremos preservar los ecosistemas de los destinos que visitamos debemos de aceptar y adoptar.

En este artículo vamos a centrarnos en qué es el turismo sustentable o sostenible como tal, así como en las medidas que se están implementando en la Riviera Maya para poder ser considerada como un destino turístico sustentable.

Muchas veces el turismo sustentable es relacionado únicamente con la preservación del medio ambiente y esto no es del todo incorrecto, sin embargo, la sustentabilidad abarca también los aspectos sociocultural y económico para el desarrollo de un lugar, habiéndose de establecer un equilibrio adecuado entre esas tres dimensiones para garantizar su sostenibilidad a largo plazo.

Muy a grandes rasgos el turismo sustentable debe dar un uso óptimo a los recursos ambientales que son un elemento fundamental del desarrollo turístico, manteniendo los procesos ecológicos esenciales y ayudando a conservar los recursos naturales y la diversidad biológica.

Así mismo, debe respetar la autenticidad sociocultural de las comunidades anfitrionas, conservando sus activos culturales arquitectónicos, sus valores tradicionales y contribuir al entendimiento y a la tolerancia interculturales.

Por último, pero no menos importante, debe asegurar actividades económicas viables a largo plazo, que beneficien a todos los agentes involucrados de manera equitativa, entre los que se encuentren oportunidades de empleo y obtención de ingresos estables, servicios sociales para las comunidades anfitrionas y acciones que contribuyan a la reducción de la pobreza.

Para que el desarrollo sustentable del turismo pueda ser efectivo se requiere de la participación informada de todos los agentes relevantes, es decir, del sector público, el sector privado, así como de los turistas.

Deben existir políticas firmes, directrices claras y objetivos precisos y a la altura de las circunstancias para lograr detener el acelerado paso hacia el punto de no retorno.
Entender que el logro de un turismo sostenible es un proceso continuo y requiere un seguimiento constante de los impactos, para introducir las medidas preventivas o correctivas que resulten necesarias.

El turismo sostenible debe reportar también un alto grado de satisfacción a los turistas y representar para ellos una experiencia significativa, que los haga más conscientes de los problemas de la sostenibilidad y fomente en ellos unas prácticas turísticas sostenibles.

El principal objetivo en la Riviera Maya es lograr un turismo sostenible y responsable para conservar el destino que los turistas disfrutan tanto.

En julio del 2018, en la ciudad de Cancún, las empresas, gobierno y sociedad civil realizaron un manifiesto por un Turismo Sostenible, Solidario y Socialmente Responsable para el estado de Quintana Roo y la península de Yucatán.

Uno de los principales objetivos de este manifiesto, es que los participantes que se sumen a esta iniciativa redefinirán los indicadores de éxito del turismo que se lleva a cabo en la región. Este objetivo se logrará adoptando criterios de conservación de ecosistemas y bienestar social, y reconocer que “más”, no siempre significa “mejor”, es decir, no buscarán más el turismo masivo.

En el ámbito del turismo socialmente responsable, las empresas privadas se comprometen a integrar a los productores locales, ya sea como pequeñas o medianas empresas, las cuales forman parte fundamental de la cadena de valor del turismo. Pero no solamente se trata de integrarlas, sino de implementar condiciones laborales justas para que las economías locales se desarrollen digna y equitativamente.

Siendo así, hablando del tema laboral, los aliados se comprometen a asegurar que el acceso al trabajo sea inclusivo y para todas las personas, sea cual sea su condición social.
Las entidades de gobierno se comprometen a impulsar modelos de preservación del patrimonio natural y cultural en el turismo de naturaleza (ecoturismo, turismo de aventura y rural) y en el turismo en áreas protegidas, estableciendo límites a las capacidades de carga de cada sitio y asegurando la distribución de los beneficios para los habitantes de estos territorios.

Sin duda queda un largo camino por recorrer para poder presumir que la Riviera Maya, el destino turístico más grande de México y uno de los más visitados a nivel mundial es un destino turístico sustentable, pero como mencionamos líneas arriba, se trata de un proceso continuo y afortunadamente podemos decir que ya dimos el primero paso.

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