Ahora que ya conocemos cuales con las funciones y actividades de un almacén, en el artículo de esta semana hablaremos sobre los diferentes tipos de almacenes que han ido surgiendo, según las necesidades de almacenamiento de las empresas, las características que los componen, la adecuación del lugar de almacenaje, su mecanización, entre otros.
En Grupo Sierras disponemos de un almacén nacional propio, el cual está adaptado para albergar casi cualquier tipo de mercancías. Además, está en proceso de habilitación como Depósito Fiscal.
Empezaremos por la clasificación de almacenes según el tipo de mercancía almacenada.
En este tipo de almacenes podemos encontrar los siguientes:
Almacenes de materias primas
Son aquellos almacenes que tienen como función guardar y custodiar las materias y materiales básicos para la fabricación y/o comercialización de un producto en específico.
Este tipo de almacén suele encontrarse cerca del departamento de producción debido a que los materiales que contiene serán transformados por dicho departamento.
Almacenes de productos semiterminados o en curso
Los almacenes de productos semiterminados o en curso, también conocidos como almacenes en proceso, son, como su propio nombre indica, los encargados de albergar productos que están en fase de producción pero que aún no han finalizado dicha fase.
Almacenes de productos terminados
El tipo de almacén de productos terminados es aquel que se encarga de controlar y custodiar los productos que ya han finalizado la fase de producción y que están listos para su venta.
Dentro de este tipo de almacén también se pueden incluir los almacenes de materiales auxiliares, de envases y embalajes, de desperdicios, los almacenes de materiales obsoletos y los almacenes de devoluciones, aunque estos suelen ser menos usuales.
Ahora bien, los almacenes también se pueden clasificar en dos grupos, según su grado de mecanización. Por un lado, los almacenes convencionales, cuya altura no supera los 10 metros y están equipados con estanterías metálicas sencillas colocadas a cierta distancia para facilitar las maniobras y, por otro lado, los almacenes de alta densidad.
Dentro de los almacenes convencionales se encuentran:
Almacenes convencionales que utilizan carretillas contrapesadas convencionales
En este tipo de almacenes, la altura de las estanterías no puede superar los 4 metros de altura y la anchura entre los pasillos debe ser de 5 metros aproximadamente para que la mercancía pueda ser manipulada.
Almacenes convencionales que utilizan carretillas de mástil retráctil
Estos almacenes tienen la ventaja de poder llegar hasta los 10 metros de altura, ganando espacio de almacenaje.
Almacenes convencionales equipados con estanterías dinámicas
En estos almacenes los pallets suelen desplazarse por rodillos ligeramente inclinados, ofreciendo la posibilidad de incorporar motores reductores o cilindros de aire para el accionamiento del desplazamiento.
Y por el otro lado se encuentran los:
Almacenes de alta densidad
Son aquellos que requieren estanterías adaptadas a las dimensiones de los bultos que albergan las mercancías. Este tipo de almacenes, debido a la dificultad del movimiento de materiales por su peso y densidad, implica el uso de maquinaria específica y no convencional.
El suelo debe ser resistente y plano y la nivelación de sus estanterías debe ser correcta para poder realizar maniobras de forma segura.
También suelen clasificarse según el tipo de recinto:
Almacenes cubiertos o de interior
Son aquellos que cuentan con diferentes tipos de cerramientos en su construcción, con el fin de limitar la incidencia de las inclemencias climáticas y de proteger la mercancía que albergan.
Almacenes abiertos o de exterior
Son aquellos almacenes al aire libre que suelen estar delimitados por cercas o por límites señalizados. Las mercancías aquí almacenadas no requieren protección contra el clima, por ello no cuentan con una cubierta.
Y por último, pero no menos importante, según su función logística:
Almacenes centrales
Son aquellos que se localizan lo más cercanos posibles al centro de fabricación. Están equipados para la manipulación de cargas de grandes dimensiones.
Almacenes regionales
Estos se localizan cerca del punto de consumo. La elección entre los almacenes regionales y los centrales dependerá del tipo de carga y de la estructura de costes de transporte de la empresa en cuestión.
Almacenes de tránsito
Los almacenes de tránsito son el punto intermedio entre la central y el centro de consumo. Su diseño permite albergar una gran cantidad de mercancía.
Almacenes temporales
Son usados para almacenar stock de forma temporal durante picos en la demanda, por ejemplo. Normalmente la mercancía almacenada en este tipo de almacenes suelen ser productos con una estacionalidad o temporalidad definida.
Recuerda que en Grupo SierraS podemos ayudarte a implementar tu propio sistema de gestión de almacenes desde cero, o bien, resguardar todas tus mercancías en nuestras propias instalaciones y en diferentes puntos estratégicos del país, a través de nuestros aliados comerciales, para que tú te enfoques en lo más importante.
Ingeniero Industrial egresado del Instituto Tecnológico de Querétaro. Con cuatro años de experiencia en la gestión de proyectos, así como en el desarrollo de procesos orientados a la mejora continua. Apasionado por la gestión de recursos y servicio al cliente al más alto nivel de exigencia.